Washington, 1 abr (Prensa Latina) La mayoría de los inmigrantes en Estados Unidos no se incluyen en el paquete de estímulo económico para enfrentar los estragos financieros causados por la pandemia del nuevo coronavirus por falta de documentos, según comentan hoy medios de prensa.
Pero resulta alarmante lo que enfrentan con las políticas oficiales del gobierno que preside Donald Trump, pese a algunos esfuerzos de disminuir sus padecimientos, pues a juicio de activistas solo interesa ahora su trabajo.
Por ejemplo, ante la amenaza de la Covid-19, la juez federal de distrito en Los Ángeles, Dolly Gee pidió a Trump hacer todo lo posible para liberar de inmediato a los cinco mil menores de edad en detención migratoria, informa el diario californiano La Opinión.
Si eso es con los niños, qué se puede esperar contra otros sectores inmigrantes en el país, preguntan activistas del sector.
Los que gobiernan no agradecen que los trabajadores del campo, la mayoría inmigrantes, se ven obligados a laborar horas extras para cumplir con la alta demanda de alimentos.
Aún cuando el gobierno los colocó en la categoría de trabajadores «esenciales para la nación», trabajan sin protecciones y son ignorados en el billonario paquete de recuperación financiera.
«Ahora sí somos esenciales, pero cuando los trabajadores miran el cheque del salario, no se nota que son esenciales. Se les niegan derechos esenciales y las prácticas son las mismas del pasado», dijo Armando Elenes, secretario-tesorero de la Unión de Campesinos (UFW), en declaraciones a La Opinión.
En medio de la más grande crisis de salud que enfrenta la nación, quienes producen los alimentos trabajan sin protecciones como mascarillas, no cuentan con seguro médico, y si no trabajan, no ganan.
«Oficialmente más del 50 por ciento de los trabajadores del campo no tienen estatus migratorio, pero en realidad son más del 70 por ciento. Para ellos, no hay ninguna ayuda dentro del paquete de alivio financiero para lidiar con el impacto económico del coronavirus. Ni tienen derecho a solicitar la ayuda para el desempleo», señaló Elenes.
«Esto ha hecho que los trabajadores se sientan enojados, ignorados e invisibles. Le dan de comer a este país, pero no reciben beneficios esenciales. Ellos pagan impuestos a través de su Número de Identificación Personal», afirmó.
Jesús Zúñiga quien labora en una plantación de uva en Madera, California, recolectado todo tipo de uva para consumo y vino de mesa, vive con un miedo doble, ilustra el diario californiano.
«Nos estamos exponiendo, pero sin nosotros no hay fruta ni vegetales en el mercado», indicó Zúñiga, en aparente alerta al gobierno que los discrimina.
Algunos analistas califican de contradictorias las políticas del gobierno de Trump contra los inmigrantes, entre ellas, su impulso a acciones como la construcción del muro en la frontera con México, en momentos en que a causa de la pandemia de la Covid-19, la demanda de trabajo se disparó, y muchos trabajadores laboran horas extras.